miércoles, 24 de marzo de 2021

Las aves de mi territorio-Envigado (Parte 2)


 Colibríes (Troquilinos)

A pesar de su tamaño, los colibríes tienen atributos que los hacen destacar de entre las especies aladas como aves guerreras. Se les ha visto atacar incluso a halcones, que muchas veces les triplican el tamaño y la fuerza. Esto sucede generalmente cuando otros pájaros transgreden su territorio, que defienden a capa y espada con su pico, que generalmente mide lo mismo que la totalidad de su cuerpo.

Desde la era prehispánica, los colibríes han maravillado a los seres humanos, por esto, a nivel cosmogónico, estos pájaros ocupaban un lugar importante en la era precolombina. Uno de los mitos más importantes del Imperio Mexica fue el de la fundación de Aztlán. Cuenta la leyenda que, mientras Coatlicue, diosa de la fertilidad, barría su templo en la montaña de las serpientes, una brisa hizo que varias plumas de colibrí se asentaran en su seno. Fue así que en su vientre se gestó Huitzilopochtli, el dios de la guerra, quien al nacer, llegó al mundo con una armadura, un escudo de águila y sandalias forradas de plumas de colibrí. Cuando se ganó su puesto como dios tutelar de los mexicas, decidió guiarlos hasta Aztlán con sus mensajeros alados. Fue así como alcanzaron esta tierra mítica, en donde alzaron su civilización entera.

Además, de su sentido mítico y su belleza, estas aves poseen unas características únicas, entre ellas, son las únicas aves que pueden volar hacia atrás, para lo cual requieren de un gasto energético formidable y un ritmo cardiaco altísimo. En un minuto, en estado de reposo, su corazón puede latir entre 500 a 700 veces por minuto; mientras que en estado activo, alcanza las 1,200 veces por minuto. Es por esto que necesitan comidas frecuentes, que pueden sobrepasar su peso corporal hasta cinco veces en un mismo día. A pesar de su capacidad impresionante de aleteo, los colibríes son incapaces de caminar o saltar, porque su diseño anatómico se los impide. Es por esto que usan las patas para dos actividades principales. La primera, es percharse de las ramas de los árboles o de superficies sólidas para descansar o dormir. La segunda, para rascarse. 

Su ritual de apareamiento es algo mágico, utilizan una técnica conocida como “la técnica de buceo“, los colibríes machos tienen que elevarse hasta 20 metros de altura para dejarse caer de súbito. Antes de alcanzar el suelo, hacen una vuelta en U, para volver a subir. Esta acción la repiten las veces que sean necesarias para atraer a la colibrí hembra, quien se fija en aquellos que logran hacerlo con más gracia, así como llegar más alto. Otro dato maravilloso, es que estas aves pueden ver más colores que los seres humanos, esto es gracias a su visión tetracromática, debido a una desviación evolutiva.

Por ser un ave tan inquieta, su captura ha sido tremendamente difícil con el equipo fotográfico que dispongo, por eso a la fecha he capturado solamente dos especies, la Amazilia Tzacatl y el Mango Gorjinegro. 



El Mango gorjinegro (Anthracothorax nigricollis) es ampliamente distribuido pero poco común, este es un colibrí bastante grande y oscuro con un pico ligeramente curvado. El macho es mayormente verde con negro que se extiende por toda la garganta y el vientre. Las hembras tienen las partes inferiores blancas con un línea oscura sobre el centro. En ambos sexos, nota la cola morada. Se encuentra en hábitats abiertos como borde de bosque, bosques abiertos y arbustos del bosque secundario.

Momotidos (Barranqueros)

En nuestro territorio el más conocido es el Momoto Serrano, mi pájaro favorito, este es un Motmot grande encontrado en bosques y bordes desde las estribaciones hacia la zona subtropical. Mayormente verde con alas y cola azules, máscara negra y corona azul brillante con centro negro. Cola larga con raquetas. El nombre "motmot" proviene de la llamada de doble silbido, que puede sonar como un búho, y es emitida principalmente al amanecer. 

Los barranqueros son solitarias y silencios en el medio del bosque subtropical musgoso, excepto durante la temporada de apareamiento.  Se alimentan principalmente de insectos que capturan en vuelo, pero también se alimentan de pequeños reptiles y frutas. Estas aves construyen sus nidos en las orillas de los ríos, cuevas o grietas en las rocas. La hembra suele poner cuatro huevos. Tanto el macho como la hembra cuidan a los polluelos. Algunas especies de momótidos anidan en colonias.                                         
Este pájaro también ha sido parte de nuestras leyendas latinoamericanas. La leyenda Maya del pájaro Toh, que era uno de los pájaros reales que vivían en el reino de las aves de la tierra maya, en tiempos remotos. En aquel entonces, tenía una larga, delicada y brillante cola de muchos colores, que lo hacían verse tan hermoso como el mismo rey Kukul. Por eso era admirado por las otras aves. Pero esto lo volvió orgulloso y arrogante. En lugar de trabajar, se reunía con otros pájaros reales en las más frescas profundidades de la selva, donde pasaba todo el día contando historias y alimentándose en las tardes de insectos y lagartijas. Aún entonces, el Toh pedía a sus compañeros que le buscaran la comida, para no maltratar las plumas de su larga y hermosa cola.

Una tarde, negras nubes aparecieron en el cielo anunciando tormenta. Se convocó entonces a una reunión de emergencia de las aves para protegerse, asignando a cada una su tarea específica. Chujut, el carpintero; Panchel, el tucán y Mox, Xtut y Exikin, los pericos y guacamayos, se dedicaron a cortar ramas para construir un refugio. Bach, la guacharaca y Cutz, el pavo de monte, llevaron las ramas más pesadas. Los pájaros pequeños, como cuervos y oropéndulas, se encargaron de juntar pastos y pequeñas plantas para cubrir el refugio. Otras aves colectaron frutos y semillas como alimento, y algunas más se dedicaron a alertar a los animales de la selva. Entre todas ellas, Oc, el zopilote rey, actuó como jefe. 

Sólo el pájaro Toh se negó a realizar cualquier trabajo y esperó a que nadie lo viera y se escapó metiéndose entre los arbustos cercanos. Ahí encontró un buen lugar para esconderse: las grietas de una pared de piedra. Se metió en el agujero, se acurrucó y se dispuso a dormir. Convencido de la efectividad del escondite, no se dio cuenta de que su larga cola colgaba fuera del refugio, sobre un camino donde los trabajadores pasaban con su carga.

Tiempo después, el pájaro Toh se despertó y escuchó a los otros pájaros cantar. La tormenta había terminado sin hacer mucho daño y todo el reino de las aves se regocijaba por la buena suerte. Los pájaros reales llamaron al Toh y juntos volaron a su lugar favorito para posarse entre la selva. Como siempre, el Toh se colocó en el lugar más alto del grupo, para que todos pudieran admirar su hermosa cola. En eso, uno de los compañeros del grupo se empezó a reír de Toh, señalando su cola. Poco a poco todas las demás aves hicieron lo mismo, diciéndole: "Tu cola está arruinada. Seguramente la dañaste cuando trabajaste tanto como dices".

Horrorizado, se dio cuenta de lo que había ocurrido mientras dormía. El engreído pájaro reconoció su culpa, pero no podía soportar que sus amigos supieran la verdad. Su orgullo pudo más que él y se alejó volando hacia la parte más inaccesible de la selva. Ahí cavó un hoyo en un banco de material y se metió en él. Hasta nuestros días, el Toh permanece como recluso en la selva, evita a las otras aves y hace su casa en un agujero.

Tangaras

Tangara, en el idioma brasilero Tupi significa danzante o bailarín, aunque en realidad no sabemos si lo que les define son los bailes, los cantos, los mil colores que poseen, sus picos muy variados o sus gustos en la comida. Lo que sí sabemos es que son únicas en el mundo; y no se encuentran en todo el mundo, su distribución está restringida al continente Americano, con mayor diversidad a medida que se levanta la cordillera de los Andes en Sudamérica – alrededor de un 60% de las especies se encuentran en tierras andinas.

Las tangaras son pequeñas y están dotadas de alucinantes combinaciones de colores; son sumamente bellas. La principal familia de las tangaras, y por la que han estado definidas durante mucho tiempo, es la familia Thraupidae. Esta es la segunda familia de aves más grande del planeta con por lo menos 378 especies, entre las que se encuentran los famosos azulejos y verdulejos, los cuales fueron de los primeros pajaros identificados en este proyecto.

Verdulejo

Les gusta estar acompañadas, no solo de otros de su misma especie, y se alimentan de todo lo que pueden: insectos, frutos y semillas, arañas, incluso néctar de las flores. También he tenido la dicha de ver otras hermosas tangaras como la Cabeciazul, quizas el pajaro más hermoso que he visto en estos recorridos, y otras como tangara llama, la matorralera y la piranga vermeja.




Tangara matorralera


La Tangara cabeciazul (Stilpnia cyanicollis), es pequeña y llamativa, se ve mayormente negra con la cabeza azul brillante y el hombro beige. Muy común en las estribaciones andinas. Usualmente se encuentra en pares o pequeños grupos, a menudo siguiendo una bandada de especies mixtas en del dosel. Ocurre en bosques, bordes y jardines. Visita comederos de frutas.


Tangara cabeciazul

Carpinteros (picidae)


La familia de los pájaros carpinteros incluye 218 especies diferentes de aves que se encuentran en todo el mundo excepto en Madagascar, Australia y la zona de los polos. Estas magníficas aves destacan por el color llamativo de sus plumas, que varía desde el naranja hasta el verde brillante o el morado. También hay pájaros carpinteros con tonalidades rosas, amarillas y rojas. Asimismo, su tamaño puede ser diferente en función de la especie. Algunos miden solo veinte centímetros, mientras que otros pueden alcanzar los sesenta centímetros.

Estos animales tienen unos curiosos pies de cuatro dedos, dos de los cuales apuntan hacia la parte delantera de su cuerpo, mientras los otros dos lo hacen para la de detrás. Así consiguen cogerse de las ramas con mucha más facilidad. 
Casi todas las subespecies de pájaros carpinteros nacen con una curiosa habilidad: son capaces de picar los árboles más de 20 veces en cada segundo. Se cree que en total estos animales son capaces de picar en un 
árbol hasta 12000 veces. Los pájaros
carpinteros tienen un hueso ubicado en  la parte de detrás de su pico y también delante de su cerebro, con lo que consiguen un retorno muy rápido, así como otros huesos que permiten que no se haga daño al picar de esta forma tan rápida.                    

De esta familia he identificado en mi territorio dos especies, el carpintero bellotero y el Coronirrojo.



El Carpintero bellotero (Melanerpes formicivorus) es un pájaro carpintero de tamaño mediano. Este tiene un patrón único de la cara con corona roja, frente y garganta amarillentas y ojo pálido. Mayormente negro brillante con rabadilla blanca y pecho rayado. Vive en bosques mixtos de robles y coníferas, donde se encuentran en grandes grupos, acaparando bellotas en troncos de árboles y postes telefónicos. Se reproduce cooperativamente. Es común confundir su canto con el canto de las cotorritas. Se denominan así porque guardan bellotas en los árboles, haciendo agujeros en los árboles que convierten en sus propias despensas para poder guardar semillas y bellotas para consumirlas en los meses más fríos del año. Son muy curiosos porque no guardan todas las bellotas juntas sino que van haciendo agujeros para guardar cada una de ellas y siempre se acuerdan de dónde las han dejado.




viernes, 19 de marzo de 2021

Las aves de mi territorio-Envigado

Para muchos la pandemia ha sido una época en la que nos tocó encerrarnos por mucho tiempo en nuestras casas y en la que perdimos mucho del contacto con las personas más cercanas. En mi caso, al inicio además perdí esa poderosa relación con la naturaleza. Después de medio año de vivir aislado del mundo, tome la decisión de unir dos cosas que me han gustado desde hace muchos años, por un lado la fotografía y por otro lado la naturaleza. Tengo la fortuna de vivir al lado de dos santuarios naturales, a un lado el Parque Lineal Ambiental La Heliodora y por el otro el Humedal del Trianon. En esas primeras salidas de septiembre, cuando se levantaron gran parte de las medidas restrictivas, empecé a fotografiar estos lugares, reconociendo el territorio, pero aún no había algo que me permitiera encontrarle un sentido.  Algunas plantas y flores, unos cuantos insectos, unos bellos paisajes, y ahí empezaron a aparecer aquellos seres voladores que le dieron forma a este proyecto, las aves de mi territorio-Envigado. También ha sido una forma de sentirse viajero y explorador cerca a casa. 

Al inicio, era muy complejo ubicarlos y fotografiarlos, porque requiere un entrenamiento para integrar el oído, el ojo y la cámara en el instante preciso. Las primeras tomas fueron a los pájaros más comunes de esta región, que por la gran cantidad de individuos que se pueden identificar en el camino, más fácilmente es su ubicación, además de ser menos esquivos que otros menos prevalentes en esta parte del valle de Aburrá. Con el tiempo, la constancia y la disciplina mis sentidos se empezaron a agudizar y comenzaron a aparecer las especies más hermosas y más difíciles de identificar. 

No pensaba en un proyecto como tal, si no que con el paso de los meses empecé a ver que ya tenia muchas aves en mi archivo, pero aún no las tenia identificadas, pues no sabia los nombres de la mayoría de ellos. Estuve investigando como hacerlo de forma sistémica, y para ello conseguí una app que se llama merlín, desarrollada por el Laboratorio de Ornitología de Cornell. Es muy buena por que te ayuda a saber que especie es de acuerdo a la zona donde hiciste el avistamiento, y te permite ir haciendo un archivo de estos avistamientos. La magia de Merlín está basada en que la aplicación sabe qué aves están en tu zona basándose en los millones de avistamientos por observadores de aves de todo el mundo, quienes comparten sus datos y fotos al proyecto de ciencia ciudadana eBird.  

Con el paso de los meses, es cada vez más complejo hallar nuevos avistamientos, pero esta bien ir mejorando las tomas de las especies que ya he identificado, y seguramente llegaran mejores fotografías. Tengo que aclarar que este ejercicio lo he hecho con una cámara compacta nikon coolpix p530, que si bien es una buena cámara, no es la más apta para el avistamiento, pues lo mejor es una cámara réflex con un teleobjetivo.

Según la Guía Fotográfica de las Aves del Valle de Aburrá - Segunda Edición, en los diez municipios que comprende el Área metropolitana del Valle de Aburrá, y del cual Envigado es uno de ellos, se han identificado cerca de 500 especies de pájaros. Si bien Envigado es un municipio del cual la mayor extensión corresponde a los territorios rurales, lo más seguro es que de estas 500 especies, solo una parte habiten aquí. Al momento de escribir este post, ya había identificado 60 especies diferentes. Próximamente estaré contándoles de algunos de las interesantes que he descubierto. 

Por ahora los dejó con esta especie endémica de la región, la Chachalaca colombiana o Guacharaca (Ortalis columbiana). Esta es ave grande parecida a una gallina, que anda en el suelo de matorrales y arboledas.  Uniformemente marrón con cuello y pecho escamados, piel roja desnuda en la garganta y plumas externas de la cola rojizas.


Se encuentra en hábitats boscosos, incluyendo arboledas y bordes. Esta especie contribuye a dispersar semillas y por tanto se la considera partícipe en la regeneración de bosques. Usualmente, se puede encontrar en pequeños grupos familiares o parejas. 

Últimamente he escuchado que se han venido convirtiendo en nuestras nuevas vecinas. Sin embargo, han estado en este territorio desde siglos, es por eso que podemos decir que las guacharacas no nos invaden, aunque no se sabe por qué están bajando más a las ciudades, pero sí se nota una adaptabilidad por parte de ellas en la urbe. 

También es que quizás que el urbanismo se ha ido apropiando de las montañas y de las zonas boscosas del sur del Valle de Aburrá, yo le apuntó más a esta segunda hipótesis, la cual nos deja grandes preocupaciones para su conservación a futuro. Yo por ejemplo, solo supe de su existencia hasta hace unos años, tal vez puede ser que por no ser vecino de envigado desde mi infancia.
Es particularmente gracioso escuchar sus sonidos estridentes, con una variedad de cantos, cacareos, gritos y graznidos. Esta es una especie de aves que se hacen sentir durante tempranas horas de la mañana y al caer la tarde. Estos sonidos, más que todo, los hacen para marcar territorio, buscar su reproducción y alimento.